La NATURALEZA, también ha dotado a nuestro cuerpo de una inteligencia innata, de modo que si nos alimentamos con escasa calidad y consumimos estimulantes desnaturalizados, nos faltan sustancias vitales que podría compensar, perooooooo......"durante un tiempo determinado".
Si le pedimos al cuerpo, incluso le exigimos, a veces de forma inconsciente, la disponibilidad de rendir, tanto mental como físicamente por encima de sus posibilidades, el destino es el envejecimiento prematuro, las enfermedades, la merma constante de energía, infecciones, alergias, estrés, depresión, alteraciones del sueño y un laaaaaargo etc.....
Si por el contrario, consumimos alimentos que crecen de forma natural y tienen su maduración en el árbol o en su mata, pues entonces le devolvemos al organismo lo que realmente necesita para su subsistencia biológica y la energía necesaria para el alto rendimiento que siempre ha estado dentro de nosotros mismos.
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